Si dudas entre colocar o no un cabecero en tu cama, te contestamos al instante: sí, hazlo. Tiene múltiples ventajas y ningún inconveniente. Existen dos motivos fundamentales que respaldan la colocación de esta tradicional pieza. Por un lado, a nivel estético supone un elemento que aporta personalidad, calidez y estilo a tu dormitorio. De hecho, enmarca la zona de la cama y contribuye a crear ese espacio agradable y acogedor que te espera cada noche para facilitar al máximo tu descanso.
Podemos decir que modelos de cabecero hay casi tantos como preferencias personales. Vale la pena ver varias opciones antes de elegir la que mejor te encaje en función del espacio que dispongas y tus gustos particulares. Pueden ser grandes y robustos para destacar sobre el conjunto del dormitorio o, por el contrario, jugar un papel más discreto con el fin de dar un mayor protagonismo a otros elementos de la habitación. Si, por ejemplo, piensas poner cuadros en la misma pared, o quieres dar prioridad a la colcha y los cojines con los que vistas la cama, cuanto más neutro (sencillo) sea el cabecero, mucho mejor. Sin embargo han sido las grandes cadenas hoteleras las que han implantado la tendencia de cabeceros con mucho protagonismo, cubriendo en ocasiones toda la pared de lado a lado, incluso subiendo en altura, a veces hasta llegar al techo. Madera con dibujos geométricos, distintos tonos en un mismo panel o combinación de tela y madera, enmarcados para crear esa sensación de solidez y buen gusto que les caracteriza.
En cuanto a los materiales, puedes optar por la madera y sus múltiples tipos o acabados -incluidos los diferentes lacados- o decantarte por los tapizados en piel, terciopelos o hasta telas lavables, que quedan también muy elegantes y contribuyen además a amortiguar los ruidos.
Vamos a detenernos un momento en una técnica de decoración muy extendida, ligada a la milenaria cultura china. Hablamos del Feng Shui y su capacidad de aportar armonía y un ambiente tranquilo y agradable a los espacios. Según esta técnica, la cama siempre ha de contar con un cabecero y la pared donde se encuentre es recomendable que esté orientada al norte para permitir que la energía positiva fluya adecuadamente en beneficio de un descanso cien por cien placentero.
Hasta ahora te hemos hablado de las posibilidades más estéticas o decorativas de esta pieza que para nosotros, desde nuestra experiencia, es clave en cualquier dormitorio. Pero también tiene una parte práctica sobre la que vale la pena incidir. Para empezar, aísla la cama de la pared, contribuyendo de esta manera a evitar roces y desgastes de la pintura o papel en esa zona, así como los golpes contra la pared cuando cambias de posición o haces movimientos involuntarios mientras duermes. Por otro lado, si optas por modelos tapizados, además de absorber el ruido como ya hemos apuntado, puede servir de cómodo respaldo si eres de los que se llevan un libro o el portátil a la cama.
Si quieres ampliar esta información, acércate a nuestras instalaciones y nuestro equipo de expertos en diseño y mobiliario te mostrarán las mejores opciones en función de cómo sea tu casa y tus gustos personales. Te esperamos en la Avda.de Novelda, 273, Alicante, en horario ininterrumpido de 10 a 20h. de lunes a sábados. Estamos seguros de poder ayudarte porque además podrás ver en nuestra tienda muchas opciones expuestas. Ven, conócenos.
